Auckland, siempre verde
Auckland, 4 al 6 de marzo de 2017
Auckland es el primer destino de muchas personas que llegan a Nueva Zelanda ya que la gran mayoría de los vuelos internacionales aterrizan aquí. Es la ciudad con mayor cantidad de habitantes del país (casi 1.4M) y también fue nuestro punto de entrada desde Laos (después de hacer escala en Malasia y Singapur). Para nosotros fue una fortuna que Iain y Julie nos recibieran en su casa con la misma hospitalidad que ya nos habían brindado la primera vez hace un poco más de cinco años (incluyendo sus deliciosas cenas y maravillosas historias de montañismo amenizadas con vino de la región), sin embargo esta vez adicionalmente organizaron sus agendas para ser nuestros guías locales.
Habiendo recorrido los principales atractivos de la cuidad en nuestro viaje anterior, en esta ocasión Iain y Julie organizaron algunas caminatas para hacer durante el día, en las que pudimos apreciar, una vez más, el cuidado con el que los kiwis (como se conoce a los neozelandeces) han protegido su país, creando paraísos naturales para disfrutar a pocos minutos de distancia.
El primer día visitamos Rangitoto, una isla volcánica justo en frente de Auckland con aproximadamente 600 años de antigüedad. Durante muchos años fue un destino de veraneo y algunas personas construyeron sus casas de recreo (conocidas como bach) sin embargo ahora es un área de conservación natural y cuenta con varios caminos para recorrerla. Desde Auckland se toma un ferry (NZ$30 por persona ida y regreso), en la isla no hay almacenes ni restaurantes, así es que se deben llevar todas las provisiones. En nuestro caso tomamos el ferry del medio día y caminamos hasta la cima del volcán, hicimos el recorrido del cráter y visitamos las cuevas que dejó la lava. Tomamos el ferry de regreso a las 4:30 pm.
El segundo día recorrimos el Parque Regional Waitakere Ranges, el cual está en la costa oeste de Auckland (al otro lado de Rangitoto que está en la costa este). Allí visitamos Lion Rock, cerca de la población de Piha, una pequeña roca que puede subirse fácilmente desde la playa. Después hicimos un pequeño recorrido del “Hillary Trail” que nos permitió ver impresionantes riscos y la vegetación nativa. Finalizamos el recorrido en el centro de visitantes, que aunque estaba cerrado, tenía una hermosa pasarela exterior para apreciar el parque.
En nuestro último día en la ciudad, antes de irnos hacia Queenstown, sólo tenÍamos las horas de la mañana, así es que Iain nos llevó a un recorrido un poco más corto, en el parque Omana desde donde pudimos ver los edificios del centro de Auckland y Rangitoto.
Fue muy agradable conocer esta nueva faceta de Auckland, compartir con Iain y Julie e iniciar nuestro recorrido por Nueva Zelanda con varias caminatas que, aunque cortas, nos empezaron a motivar para los días por venir.
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