Paseando por Barcelona

España
2 junio, 2014
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Barcelona, Agosto 23 al 25 de 2012

No hay sentidos suficientes para vivir Barcelona. Los olores de la comida, los colores de las calles, las texturas de los edificios, los sonidos del acento catalán, el sabor amargo de saber que no es para siempre. Mi mamá, mi hermana y yo llegamos a Barcelona antes de tomar un crucero de 12 días por el mediterráneo, con tres días de anticipación para recorrer muy rápidamente la ciudad y visitar los lugares representativos. Alquilamos un apartamento cerca de la Rambla del Raval en airbnb por €100 la noche y antes de que llegáramos a instalarnos ya le habían robado a mi mamá la billetera con todo el dinero en el metro [haciendo clic en este enlace puedes obtener $20 de crédito en airbnb].

Como la vida depende de cómo la mires, luego de poner la denuncia (nada grato considerando la larga fila de turistas más o menos en las mismas) decidimos sacar la buena actitud y recorrer esos lugares tan mencionados de Barcelona sumergiéndonos de cabeza en la ciudad hasta donde nuestro corto tiempo lo hacía posible.

Día 1

Sólo tuvimos el final de la tarde para disfrutar un poco por el tiempo que perdimos denunciando el robo, caminamos por la zona de la Rambla del Raval donde hay restaurantes y cafés al aire libre y luego la Plaça del Portal de la Pau y el corredor hasta el centro comercial Maremagnum desde donde contemplamos el atardecer sobre el mar y el lento movimiento del Teleférico del Puerto.

Atardecer en Barcelona, teleférico del puerto

Día 2

Caminamos hasta la Plaça de Catalunya desde donde tomamos un bus hasta el Park Güel (nuestra primera aproximación a Gaudí). Lo mejor del Park Güel es adentrarse en la montaña, la mayoría de los visitantes ingresan por la entrada principal desde donde se llega al dragón y la escalinata que conduce a la plaza de la naturaleza, pero definitivamente vale la pena caminar un poco más, recorrer los viaductos y llegar hasta el Turó de las Tres Creus. Desde la parte superior del viaducto de las Jardineras se puede apreciar la ciudad y admirar la impotente construcción de la Sagrada Familia. Desde el parque tomamos un bus hacia la zona de La Rambla, de nuevo un lugar en el que vale la pena perderse, salirse de la vía principal y recorrer las pequeñas callejuelas.

Al finalizar el día nos dirigimos a la Fuente Mágica de Montjuïc para ver el espectáculo de luces, sonido y agua. No estábamos muy preparadas para lo que íbamos a ver así es que quedamos impresionadas con el show, el montaje es magnífico, la combinación entre la música, los movimientos y los colores realmente nos impactaron. Es importante referirse a la página web para tener información actualizada sobre los horarios.
Esa misma noche nos encargamos de comprar las entradas para visitar La Sagrada Familia al día siguiente. Si bien tuvimos que buscar donde imprimir las entradas, fue un esfuerzo pequeño comparado con las largas horas de espera en la fila, ya que quienes tienen los boletos comprados ingresan por una entrada preferencial. Al comprar en el sitio web se elige el día y la hora de ingreso

Día 3

Nuestro primer destino fue La Sagrada Familia. La basílica es realmente impresionante, aun si no se es católico. En mi caso fue increíble visitar una sala pequeña en la que explicaban cómo toda la obra de Gaudí estaba inspirada en la naturaleza (los pétalos de las flores, las semillas del trigo, los árboles), buscando nuevas técnicas revolucionó la arquitectura no sólo de su época sino para siempre. La visita requiere unas 2 horas por lo menos, definitivamente recomiendo subir a la torre (3€ adicionales) y bajar caminando, las escaleras en caracol son muy hermosas. También sugiero buscar un parque queda justo al otro lado de la entrada principal, hay un pequeño lago y la vista de La Sagrada Familia desde allí es muy bonita.

En la tarde recorrimos la zona del Paseo de La Gracia, visitamos las casas Batlló y Milà (o La Pedrera), lugares famosos por la arquitectura de Gaudí. Sólo las vimos desde afuera y de las dos mi favorita es la casa Battló por los colores de la fachada y las formas de “calaveras” de los balcones. Ambas casas se pueden visitar tanto en el día como en la noche y ofrecen diferentes planes para los turistas.

Casa Milà - La Pedrera — Casa Milà – La Pedrera

Finalizamos el día y nuestra corta visita a Barcelona paseando por la Ronda Litoral.

A la mañana siguiente nos despedimos de Barcelona. Nuestros sentidos estaban un poco aturdidos y agradecidos de todo lo que recibieron sin embargo este era apenas el inicio del viaje y de todas las experiencias que vivimos juntas.

Datos útiles:

Cómo llegar: nosotros viajamos desde Madrid en un vuelo de Ryanair que aterrizó en Girona. Desde allí tomamos un bus hacia la ciudad (€15 c/u) que nos dejó en la estación Arc d triump.
Para desplazarnos por la ciudad compramos la tarjeta Hola BCN! fue una manera conveniente de tomar todo el transporte público durante los 3 días que estuvimos en la ciudad. Hay otras opciones más costosas que incluyen algunos descuentos en las principales atracciones.
Nos robaron una vez y nos intentaron robar otra. La primera vez falló nuestro sentido común así es que por favor que no falle el tuyo…
Cocinamos mucho en el apartamento para mantener nuestros gastos bajos (y porque mi mamá estaba un poco enferma) sin embargo en España hay muchas delicias para probar ¡no se lo pierdan!

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