Planeación de viajes
Publicado originalmente en ELTIEMPO.COM
La inspiración para decidir el próximo viaje puede venir de muchas partes: historias de otros viajeros recorriendo caminos poco conocidos, un programa de televisión que descubre los secretos de una ciudad milenaria, la escena de una persecución a toda velocidad en una película de acción, el deseo de recorrer lugares emblemáticos o algún sueño no cumplido en la infancia. Y de repente (o después de pensarlo mucho) lo decidimos: Disney, Buenos Aires, el sudeste asiático o Europa se convierten en el próximo destino. Si ya decidiste que vas a organizar el viaje por tu cuenta, la siguiente pregunta seguramente es ¿por dónde empezar?
¿Cuándo ir?
Si bien muchas veces tenemos restricciones sobre cuándo podemos tomar vacaciones, definitivamente ir a un lugar en el momento menos adecuado puede hacer que la experiencia sea un fracaso total. Investiga cuál es la mejor época considerando que haya un buen clima (en muchos lugares la primavera o el otoño pueden ser una buena opción) y pocos turistas (ayudará a que los costos no sean tan elevados). Tener en cuenta otras consideraciones como evitar ir en Ramadán a una región musulmana también es algo importante. Para definir la fecha del viaje debes estar al tanto de los preparativos necesarios, como los trámites de las visas de viaje o las vacunas necesarias, ya que una mala planificación puede hacer que ni siquiera logres subirte al avión.
¿Por cuánto tiempo?
Si los 15 días hábiles de vacaciones al año te permiten ser flexible sobre cuánto tiempo quedarte en un lugar, nuestra recomendación es que te tomes el viaje con calma. Aunque es posible recorrer 8 países de Europa en dos semanas, es preferible dedicarle ese tiempo a sólo uno o máximo dos países para así llegar a disfrutar más de lo que cada sitio tiene para ofrecer. Nuestra regla general es no quedarnos menos de 3 días en un lugar, de esta manera logramos un buen balance entre lo que se puede conocer y los desplazamientos hacia el siguiente destino. Sin embargo también hacemos excepciones: cuando visitamos Nueva Zelandia encontramos que era fácil moverse entre ciudades (a un par de horas de distancia) y en cada una había generalmente sólo una atracción para visitar, así es que casi a diario dormimos en un lugar diferente.
¿Exactamente a dónde?
Para determinar el itinerario específico, nuestra sugerencia es utilizar Google Maps e ir trazando la ruta, así podrás identificar qué tan lejos están los lugares entre sí o si es más eficiente modificar algún trayecto. La selección de los lugares a visitar es algo muy personal, sin embargo puedes pedir consejo a otras personas que ya hayan visitado el país al que viajas, buscar en los foros de viajeros en internet opiniones, basarte en las rutas sugeridas en las guías de viaje o definir un destino por su relevancia, por ejemplo consultando la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco.
¿Cuánto presupuesto?
Probablemente sea uno de los puntos más complicados y el que determine cuándo viajar y por cuánto tiempo [aquí te contamos cómo hacemos nosotros para tener el dinero necesario para viajar]. Este es nuestro método para hacer un presupuesto, usamos una hoja de cálculo y escribimos en cada columna: fecha, en qué lugar pensamos estar, desplazamiento necesario para llegar a ese sitio, actividades que queremos realizar, nombre del alojamiento que vamos a usar, costo del transporte, costo de las actividades, costo del alojamiento, costo de la comida, otros costos (por ejemplo las visas) y finalmente el costo total por día.
Al costo total al final siempre le agregamos entre un 10% y un 20% para imprevistos dependiendo de qué tan confiable es la información que usamos para estimar los valores. Para obtener las cifras buscamos en internet los costos estándar de cada cosa que estamos valorizando y leemos experiencias de otros viajeros para ver sus sugerencias. Sitios web como Budget Your Trip (en inglés) pueden ser útiles en la estimación.
¿Y ahora qué?
Con el plan un poco más estructurado, empieza a aterrizar los detalles, a realizar las reservas, comprar los tiquetes y por supuesto, ¡a preparar las maletas! Revisa que tengas lo necesario y evita dejar para último minuto los preparativos. En un próximo post les contaremos algunas herramientas especificas que utilizamos para realizar toda la planeación de nuestros viajes.
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